martes, 29 de septiembre de 2015

56 AÑOS DESPUÉS SE REENCUENTRAN Y SU AMOR SEGUÍA INTACTO; UNA VERDADERA HISTORIA DE AMOR



WIWIRISKIS, No cabe duda de que el amor puede ser tan fuerte y tan puro que ni el mismo tiempo puede disolverlo, esto sucedió con esta pareja que después del 56 años de volvieron a ver y su amor era tan fuerte como el día de su boda.



La vida no suele ser justa en muchas ocasiones. Así  fue la historia de esta pareja de esposos que tuvieron que separarse gracias a que tres días después de su boda Boris tuvo que ir a combatir a la guerra, esto en 1945.


Anna Kozlov, su esposa, no le quedo mas que despedir a su esposo después de darle un beso y esperar su regreso; sin embargo el padre de  Anna fue desterrado de las tierras donde vivían -muy poco tiempo después de que Boris hubiera ido al frente de batalla- debido a que su padre fue declarado enemigo publico por negarse a trabajar. De esta manera Anna junto con toda su familia al lejano oriente ruso.



La presión de la familia de Anna y en particular de su madre la cual le argumentaba que Boris ya se habia vuelto a casar (aparte de deshacerse de todo aquello que tuviera que ver con Boris, cartas, fotos etc.) fue muy grande pidiéndole que se volviera a casar.





“Me eché a llorar, no quería ni pensarlo. Mi madre me gritó y me repitió que aquello era una tontería. Me convenció de comenzar una nueva vida con un hombre llamado Nefed. Con el tiempo ambos lograron hacer que pensara que él era quien debía estar a mi lado“.


Al terminar la guerra Boris regresa a su pueblo y se encuentra con la mala noticia de que Anna ya no se encontraba ahí, inicio una gran búsqueda sin obtener resultados favorables, lefue imposible localizarla pues cuando Anna se volvió a casar cambio su apellido  y esto obstaculizo todo, después de esto Boris cae en un severa y profunda depresión. 


Años mas tarde Boris vuelve a casarse.

Tras la caída de la Unión Soviética, allá por los años 90 Anna (la hija del enemigo publico) logro visita Borovlyanka, su pueblo natal.

La vida los volvió a dejar como en un principio pues ambos enviudaron pero el destino les tenia preparada una gran sorpresa puesto que ellos se encontraban en el mismo lugar y en la misma hora, un sueño que perduro por 56 años.

Anna regreso a su pueblo a pasar sus últimos años de vida en su pueblo natal y Boris por su padre fue a visitar la tumba e sus padres.

Anna vio a lo lejos una silueta saliendo de un auto que no pudo reconocer de inmediato pero tras prestar atención logro reconocer la figura de aquel hombre que ha amado toda su vida su primer esposo, el amor de su vida.

”Pensé que me engañaban mis ojos. Vi como ese hombre se me acercaba y me miraba. Mi corazón se detuvo por un momento y entendí de quién se trataba. No pude contener las lágrimas de felicidad“.


Y por su parte Boris, después de tantos años logro su sueño volver abrazar a la dueña de su corazón y su amor.


“Si, yo amé a otras mujeres durante esos años pero siempre supe que ella era el amor de mi vida y la dueña de mi corazón”.

Corriendo fue al encuentro de su Anna y fue justo ahí cuando cayeron de sus hombros el peso de los 56 años de búsqueda, narra que se sintió el mismo de hace mas de medio siglo.

Esa noche fue especial y la pasaron en vela platicando sobre todo lo que había acontecido; Boris, volvió a pedirle matrimonio y aunque Anna se negó en un principio termino aceptando. 
”Nunca pensé que iría al altar a esta edad. Fue la boda más feliz de mi vida"



“Desde el momento que volvimos a estar juntos puedo jurar que no hemos peleado ni una sola vez. Estuvimos separados por mucho tiempo y nadie sabe cuánto más nos queda, por eso no perdemos el tiempo en discusiones”.
“Si, yo amé a otras mujeres durante esos años pero siempre supe que ella era el amor de mi vida y la dueña de mi corazón”.


Hasta el dia de hoy Anna es toda una dama, ama de casa y digna esposa mientras que Boris es el mismo caballero de hace 56 años y gran marido.
“Si es de amarte, lo haré hasta el fin del mundo” — cita uno de los poemas que le dedicó a su Anna en 1945.



 Fuente: The Telegraph